¿Se viene cambios en las exportaciones de servicios?

El Banco Central estaría evaluando llevar adelante cambios para simplificar las exportaciones de servicios. ¿En qué casos? ¿A qué responde esta decisión?

Lunes 9 de junio de 2025, Mg. Yanina S. Lojo

En línea con la estrategia de desregulación gradual del mercado de cambios, el Banco Central de la República Argentina (BCRA) analiza implementar una serie de medidas orientadas a facilitar la exportación de servicios profesionales realizados por personas humanas.

El objetivo central es eliminar trabas operativas, reducir costos asociados a la recepción de divisas y fomentar la formalización de ingresos del creciente ecosistema de trabajadores independientes, freelancers y nómades digitales.

El presidente de la entidad, Santiago Bausili, reconoció en su participación en un programa de streaming la semana pasada que persisten "problemas técnicos" en el sistema bancario argentino que dificultan la operatoria de quienes exportan servicios, incluso luego de la eliminación del requisito de liquidación obligatoria. “Hay aspectos operativos que todavía no están resueltos y que estamos abordando para mejorar la experiencia del usuario”, afirmó el titular del organismo.

¿Cuáles son las obligaciones actuales?

Desde el 1° de enero de 2025, y en el marco del nuevo régimen cambiario, las personas humanas ya no están obligadas a liquidar sus cobros por exportación de servicios en el mercado oficial, aunque si deben ingresarlas. Este beneficio está vigente solo para un listado de servicios específicos y la persona debe adherirse al régimen. Esta decisión se fue consolidando en etapas:

• En 2023, el límite de libre disponibilidad era de USD 12.000 anuales.

• En julio de 2024, se amplió a USD 24.000.

• A comienzos de 2025, se elevó a USD 36.000.

Recordemos, la persona debe ingresar los fondos al país correspondientes al cobro pero no esta obligado a liquidarlos, es decir, a convertirlos en pesos.

Sin embargo, según señalo el representante del BCRA la normativa vigente no ha sido suficiente para resolver de fondo los obstáculos operativos que enfrentan los profesionales. Según diversos reportes, los bancos continúan cobrando comisiones de hasta el 10 % sobre transferencias del exterior, se registran rechazos o demoras en las acreditaciones y existen plataformas poco adaptadas para recibir pagos en moneda extranjera.

¿Qué se buscaría modificar?

La nueva fase de flexibilización impulsada por el BCRA apunta a:

• Reducir las comisiones bancarias que impactan de forma desproporcionada sobre los pequeños exportadores de servicios.

• Eliminar las trabas operativas que dificultan la recepción de pagos, como demoras injustificadas, validaciones innecesarias y limitaciones técnicas del sistema financiero local.

• Impulsar la bancarización de divisas mediante mejoras tecnológicas y regulatorias, sin reintroducir obligaciones formales.

Las actividades involucradas son múltiples: desde programación, diseño, edición audiovisual, consultoría legal y contable, hasta traducción, marketing digital, arquitectura, salud, y asesoría remota en diversas áreas.

La importancia de las exportaciones de servicios

La exportación de servicios profesionales por personas humanas representa una fuente creciente de divisas para el país. El avance del teletrabajo y la integración digital han favorecido la inserción de trabajadores argentinos en mercados internacionales, especialmente en rubros como IT, audiovisual, diseño y consultoría técnica. En 2024, este segmento superó los USD 3.000 millones, con perspectivas de seguir creciendo.

Desde la óptica del BCRA, facilitar esta operatoria no sólo permite captar más dólares, sino también formalizar ingresos, fortalecer la transparencia fiscal y fomentar el uso del sistema bancario, reduciendo la informalidad y el uso de plataformas no reguladas.

¿Qué se espera?

Las nuevas medidas están siendo trabajadas junto al Ministerio de Economía y las cámaras representativas del sector. Se espera que en las próximas semanas el BCRA publique una serie de disposiciones complementarias que contemplen incentivos para bancos y mejoras normativas que permitan reducir los costos y tiempos de cobro, sin alterar la actual libertad cambiaria.

“Es un sector clave por su dinamismo, potencial exportador y contribución a la economía del conocimiento. Queremos acompañarlo con reglas modernas y simples”, aseguran desde la entidad monetaria.

Mientras tanto desde los exportadores de bienes se preguntan si en algún momento les tocará a ellos.