Tras la difusión del Staff Report del FMI muchas fueron las novedades. Pero la que claramente no pudo pasar desapercibida fue la que mencionaba que Argentina se comprometía a dejar atrás el cepo en 2024.
Viernes 2 de febrero de 2024, Mg. Yanina S. Lojo
Una vez aprobada la séptima revisión del FMI por el Directorio se dio a conocer el informe técnico donde se hace un análisis no solo de las perspectivas económicas para nuestro país, sino que se detallan los compromisos asumidos por la Administración. Obviamente, hay varios puntos. Pero el que más le interesa a todos los que estamos en comercio exterior es: ¿Qué pasará con el cepo y el impuesto país?
El nuevo sistema cambiario
Según explica el documento técnico, el Gobierno se ha comprometido a mantener la política cambiaria garantizando que la misma sea compatible con los objetivos de acumulación de reservas y un régimen basado en el mercado.
En línea con eso remarca la simplificación cambiaria para el acceso a las divisas destinadas al pago de las importaciones. Afirman que se creó “un sistema más sencillo de acceso a las importaciones”. También se hacen eco del plan desarrollado para hacerle frente al gran sobreendeudamiento comercial, con una cantidad limitada de instrumentos a los importadores que registren debidamente sus deudas comerciales, según señala el informe técnico.
Sobre lo anterior, muchos importadores no estarán de acuerdo ya sea porque el pago anticipado no existe y es necesario para llevar adelante el comercio exterior, como porque lo ofrecido para pagar la deuda no es aplicable para algunos casos donde están buscando otros mecanismos. La realidad es que el nivel de reservas es peligrosamente bajo – aunque se haya mejorado un poco -, y solo se ha sostenido con el mantenimiento del cepo. Claramente, falta mucho camino por recorrer para que la situación de los pagos al exterior se normalice.
El tipo de cambio, ¿Cuál será el rumbo?
En el documento se remarca que “Las nuevas autoridades se comprometen a eliminar todas las restricciones cambiarias a corto plazo. Sumado a eso indica que se buscaría desmantelar el impuesto PAIS a fin de año."
Está semana el impuesto país estuvo en el centro de la polémica cuando se indicó que los gobernadores habían pedido coparticipación sobre el mismo. Eso volvería al gravamen que era transitorio en definitivo, porque difícilmente pudiéramos despedirnos de algo que se coparticipa, e iría por lo que sabemos ahora en contra de lo que estableció el gobierno con el propio Fondo.
El FMI espera que este conjunto de medidas le permita a nuestro país lograr el objetivo de acumulación de reservas previsto para este año que se estableció en USD 10.000 millones, y crear las condiciones para que éstas vuelvan a estar en niveles adecuados en el mediano plazo.
¿Qué pasará con el Programa Incremento Exportador?
En el informe publicado por el organismo internacional señala que se planea elinar el esquema de exportación preferencial para junio de 2024. Esta decisión, iría en línea con la eliminación de tipo de cambio múltiples.
¿Qué sucederá con la política monetaria?
En línea con lo anterior el informe señala que “Se espera que la política monetaria evolucione para respaldar la demanda monetaria y la desinflación, incluso mediante el establecimiento de un ancla nominal”.
¿Qué nos depara el futuro?
En varias ocasiones el presidente señaló que su intención es levantar el cepo cuanto antes, pero que primero debía sañar la situación del Banco Central.
Si bien las condiciones han mejorado estamos aún muy lejos, o quizás no, de que se logre el objetivo. ¿Son necesarias las restricciones? Para el escaso nivel de reservas que la administración anterior dejó, no hay opción. Salvo que se optara por liberar completamente el mercado y arriesgarse a lo que pueda pasar.
Muchos proponen un blanqueo, el problema de ese tipo de medidas es que son muy difíciles de implementar y de qué logren tener existo. Si se toman medidas que facilitan el acceso al mercado, pero después las entidades que deben cursar los pagos por miedo a que en cuatro años alguien le reclame se sienten atrapadas entre ejecutar o tomar preocupaciones adicionales.
El Impuesto País debe desaparecer en carácter urgente por lo menos de las operaciones de comercio exterior. Y no por capricho. Sino porque introduce una fuerte distorsión en los costos que repercute en los precios que pagan los consumidores. Las importaciones en Argentina ya están fuertemente gravadas y este tributo solo sigue sumando presión a los costos y por ende es los costos.
El cepo tiene que ir poco a poco desapareciendo y la unificación cambiaria tiene que llegar lo antes posible. ¿La gran pregunta es cuándo tardarán en sañar las cuentas del BCRA? Todos esperamos que, en abril con la llegada de la liquidación del campo, el camino a la flexibilización se vaya allanado. Sin embargo, una inquietud flota en el aire: ¿y si no alcanza? ¿Y si la liquidación del agro no nos da el aire que esperábamos? ¿Podrán las empresas resistir hasta abril o mayo? Parece que están a la vuelta de la esquina, pero para muchos queda demasiado lejos.
Estamos un poco mejor que antes: no hay SIRA, SIRASE, CCUCE no anda de lo que nos quitó el sueño en el último año. ¿Falta mucho? Por supuesto, pero Roma no se construyó en un día. El problema es que el sistema perverso que se aplicó durante un año y medio en nuestro país dejó a muchas empresas al borde del colapso y esas se quedan ya sin tiempo. Que el crédito internacional para nuestro país es prácticamente inexistente no solo como Estado sino para las empresas. Que la palabra se terminó de devaluar y no tiene valor.
Confiemos en que poco a poco la situación se irá normalizando, y en el mientras tanto tratemos de ayudarnos. Todos los que estamos en comercio exterior tirando para el mismo lado, dejando atrás diferencias. La unión hace la fuerza. Sonará inocente, pero solo si trabajamos todos por un mismo objetivo saldremos adelante sino terminaremos condenados al fracaso.
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